«En primera instancia la sanción por una situación normal de carrera y luego la arrogancia y falta de respeto con la que me habló la Autoridad de Prueba determinan que no siga compitiendo más en TN Clase 3 por respeto a toda la gente que me apoya y a mí mismo. No estoy dispuesto a soportar, a agachar la cabeza, ante una injusticia y mucho menos ante la falta de respeto. Asi que no seguiré mas en el TN», sostuvo enfáticamente Mauricio Lambiris a través de la televisación en vivo que realizó Tenfield/VTV de la séptima final del año del TN Clase 3 con sede en Termas de Río Hondo.
También lamentó profundamente la decisión tomada en función del equipo: «me pone muy triste por ellos, por el Alcuat Racing y por toda su gente, su familia. Los dejo a mitad de camino», señaló Lambiris con tristeza.
Durante la Serie 3 del domingo a la mañana, Mauricio Lambiris (Ford Focus) partió desde la tercera posición y de movida nomás, se planteó una lucha franca, leal, con quien iba segundo: Pipkin.
Tres curvas antes de la incidencia que motivó la sanción de las autoridades de carrera, Mauricio Lambiris emparejó a Pipkin y dejándole siempre espacio para defenderse, al uruguayo le quedó la siguiente curva favorable: ya tenía el auto colocado a la derecha de Pipkin y la curva era para ese lado. Al momento de frenar, Pipki llega a ese lugar con Lambiris prácticamente paralelo a su auto por la derecha y de igual manera lo hacía Boero a su izquierda. Los tres frenan lo más corto posible -obvio- y las ruedas de los autos de Lambiris y de Pipkin se golpean. Ninguno movió el auto hacia el otro. Fue una frenada extrema. Solo eso. La peor parte la lleva Pipkin que pierde posiciones en tanto Mauricio Lambiris sigue en carrera, consigue el segundo lugar y así finaliza la Serie.
Mucho después y pese a que Pipkin reconoce que en la incidencia no hubo nada excepto algo normal de una carrera típica de TN, las autoridades sancionan a Lambiris.
El uruguayo solicita ser recibido por las Autoridades de Prueba y allí se genera un intercambio de palabras fuerte que culmina con la exclusión de nuestro compatriota por «Conducta Antideportiva» pero no queda claro si es por la maniobra en sí misma o si es por el diálogo posterior o si es por ambas.
Al margen de la decisión dura de Mauricio Lambiris de retirarse del TN por respeto a todo su entorno y porque no está dispuesto a agachar la cabeza ante una autoridad con la que ya ha tenido otros problemas cuando entiende que hay una visible y notoria injusticia, la decisión de sancionarlo por la incidencia con Pipkin aparece como muy exagerada, desubicada y me la juego, muy flechada.
La reflexión nuestra está librada de todo fanatismo o parcialidad por tratarse de un piloto uruguayo.
Se fundamenta en cómo se estila correr en el TN; por las propias incidencias -algunas crueles y de visible mala intención- que se vieron en el mismo fin de semana de carrera y porque Mauricio Lambiris tiene una conducta deportiva intachable en el TN y en todo el automovilismo argentino. Y esa buena forma, leal, de correr, la tiene siendo protagonista. Entonces es visible que hubo atrás de la sanción aplicada por una incidencia común y corriente del TN, una intención de generarle al compatriota un daño mayor. Salvo que todos los incidentes durísimos que vimos antes y después, ameriten más exclusiones e incluso, sanciones más duras por visible y ostensible manejo deliberadamente antideportivo, con señas claras de perjudicar a un rival. Incluso, lastimarse.
Genera además un serio antecedente -aunque no creo que así suceda- para sancionar de futuro leves toques similares.
Según expresó Lambiris, «la sanción fue por el saldo que tuvo la incidencia, con Pipkin perdiendo posiciones». Ese argumento no es aplicable si en la incidencia no hubo mala intención. Y está claro que nunca la hubo.
Entonces digo: si es por el saldo de las incidencias, hay media categoría que o bien queda excluida o bien no podría seguir participando. ¿No?
M.ROSA