LOS RELATOS LE LLENABAN DE VIDA

LOS RELATOS LE LLENABAN DE VIDA

Hacía de la conversación un culto. Recuerdo perfectamente largas charlas -café mediante en coqueto pocillo- en el céntrico local de Automotora Oriental donde aprendí mucho de lo que hoy puedo saber.

Era, casi, casi, un clásico, pasar por el salón de enormes ventanales para ver que auto diferente y potente aparecía en escena.

No sé en qué momento ni como fue que iniciamos un lindo vínculo que nos acompañó dentro y fuera de las pistas. Pero fue allí donde indudablemente se solidificó con las largas tertulias al caer la tarde en la pequeña pero cálida oficinita al fondo del local.

Lo ubico, con defectos y virtudes, como integrante de una generación de la que mucho aprendimos pero más que nada, una generación que fue mucho más allá de sus posibilidades en pro del automovilismo.

Hoy se nos fue Aldo Dacal y me cuesta encontrar las palabras justas para definir sensaciones, recuerdos y enseñanzas de un tipo que aceleró con calidad y que como pocos, me hizo sentir orgulloso de mi profesión en cada oportunidad que el automovilismo nos juntó.

Esas son cosas que no se olvidan.

Me hubiese gustado un último café para escuchar pacientemente sus eternos relatos -cuasi monólogos- que le llenaban de vida.

No faltará oportunidad.

A Fernándo en especial y a toda su familia, mi apretado abrazo.

MARIO ROSA

Velatorio miércoles 13 de setiembre:

Empresa Forestier Pose, Nueva Palmira 2199 esquina Cufré, en el horario de 08:00 a 10:00 Hs.

Sepelio: Cementerio del Buceo