Lo primero, lo que realmente importa: Gastón Irazu está en perfecto estado por más que fue trasladado al Sanatorio Guemes de Buenos Aires, próximo al autódromo Gálvez de Buenos Aires.
Transcurrían las primeras vueltas de la Carrera 1 de la Fórmula Nacional. Gastón Irazu partió desde el lugar 12 y cumplió con lo que el equipo le pidió: no tomar riesgos en la largada.
No obstante, ya logró avanzar al octavo lugar y estaba en el ritmo de los de adelante.
En saya luego una linda maniobra para en el frenaje de la horquilla, sorprender a dos rivales y quedar sexto.
El ritmo era bueno y va sobre la línea de Thiago Bettino pero éste en la curva 3 pierde el control del auto y queda atravesado delante de Irazu que intenta esquivarlo hacia adentro pero no lo logra y queda parcialmente atravesado en la curva sobre el lado interno.
Santiago Baztarrica, a quien Irazu había superado entra en la nube de polvo generada por el incidente y si bien reduce la velocidad por las banderas amarillas agitadas -situación clave por el desenlace posterior- le pega de lleno al auto de Irazu que queda destrozado en la pista.
El saldo, aunque con contusiones y dolores, es favorable para Irazu y Baztarrica por cuanto no hay ninguna lesión grave y en ningún momento perdieron el conocimiento.
Irazu presentó dolores en el hombro y codo del brazo derecho en tanto Baztarrica una fuerte contusión en la pierna derecha.
Más allá de esa actuación parcial de Irazu mostrando gran capacidad conductiva, lo dicho y reitero hasta el cansancio: lo principal es que están todos bien.
En resumen, un estreno con el desenlace menos pensado y obviamente, para nada deseado.
M.ROSA
