Objetivo cumplido. La segunda carrera del fin de semana en Monza empezó con una buena noticia: Santiago Urrutia (Audi RS3) avanzaba un lugar en la grilla consecuencia de que el Gavrilov cambió el motor y largaba último.
Por lo tanto, Santiago Urrutia colocó su Audi RS3 del WRT Racing en el séptimo casillero de la grilla.
Una vez largada la carrera, nuestro compatriota quedó encajonado al abordar la compleja «variante 1», tuvo que cortar por la vía de escape y perdió posiciones para re-acomodarse desde el décimo lugar.
Mientras tanto, Gilles Magnus (Audi RS3) se acomodaba cuarto y a esa altura, el belga conseguía el tercer lugar en el Campeonato, objetivo por el que iba Santiago Urrutia.
El coloniense, con mucho esfuerzo al no contar con un auto contundente, trepaba al octavo lugar e iba por algo más con lo que tenía.
Pero las Autoridades de Prueba advierten que Magnus se movió en la largada antes de apagarse el semáforo rojo y le colocan un lógico y coherente «Pase y Siga» lo que genera un golpe de escena clave: Santiago Urrutia pasa al tercer lugar del campeonato y su única preocupación era terminar por delante del sueco Andreas Backman (Hyundai) que venía desde atrás en plan descuento.
Sobre el final de la carrera, Santiago Urrutia consolida el séptimo lugar al superar a su compañero Maxim Potty (VW Golf GTi) -que había partido desde la pole- e incluso en los tres giros finales, nuestro compatriota intenta ir sobre Morbidelli (VW Golf GTi) pero sin asumir riesgos innecesarios pues si se golpeaba y perdía posiciones, se perdía el gran objetivo: terminar tercero en el campeonato.
Allá adelante, el campeón Josh Filles (Hyundai) gana sin mayores problemas y Santiago Urrutia cruza la meta séptimo que luego sería sexto al penalizar con 10 segundos al francés Comte (Peugeot) por superar cortando camino a Lloyd (Honda) cuando luchaban por el tercer lugar.
Resumen, nuevamente Santiago Urrutia sacó de su Audi lo mejor que tenía; supo mantener la calma y esperar la carrera tras perder posiciones en la primera vuelta para evitar golpes y consigue de esa manera -a la uruguaya, sufrida- la tercera posición en el Campeonato Europeo de Turismo (TCR Europe) detrás de Files y Briché.
Enorme, gigantesco mérito, en su primera temporada no solo en una categoría de extrema competencia, sino en su primer año en autos con techo.
Además y en virtud de su gran año, TCR Europe lo reconoce con el Premio «Rookie del Año 2019» y esta noche en Italia, recibirá el galardón.
Además y consecuencia de su gran temporada, los puntos conseguidos por el coloniense le dieron al equipo belga WRT Racing el sub-campeonato en el certamen por equipos sumados a los puntos que cosechó Maxim Potty (VW Golf GTi) compañero de equipos de Urrutia.
Dicho sea de paso, el joven belga Potty fue traído por el WRT Racing para pelear el campeonato habida cuenta de que estimaban que para Urrutia, sin experiencia, se le haría «cuesta arriba» la temporada. Basta ver la tabla anual y ver donde finalizó Potty para comprender aún más el logro de nuestro joven compatriota.
A no dudarlo, el joven uruguayo ya dejó su huella en la categoría y el regreso a Europa ha sido por todo lo alto.
Un detalle más: desde 2015 a la fecha, siempre ha luchado por campeonatos y siempre ha terminado entre los tres mejores. Una estadística que refleja claramente su talento una vez se instaló en el automovilismo de alta competencia.
M.ROSA